Jueves 6 de septiembre – 10:25

Una bonita mañana de septiembre ligeramente nublada… el tipo de mañana que podría hacernos sentir un poco decaídos si no hubiéramos previsto hace una sesión de fotos en un lugar atípico y lleno de recuerdos: una antigua fábrica que hoy es el hogar de una familia encantadora.

Lo primero de todo, despejar el lugar

El escenario es inmenso. No hay que perder el tiempo. Mover los muebles de la adorable Marine y de su compañero artista no es tarea fácil: todos en sus puestos y pronto se hace el vacío.

En vídeo

Metamorfosear sin traicionar

Es un auténtico placer componer universos en un lugar como éste. Un tabique encuentra su lugar contra la pared de ladrillo visto, un material poco trabajado para conservar los rastros de un pasado industrial… Un cuadro por aquí, un jarrón por allá… el día queda organizado y, foto tras foto, el encanto sigue presente.

Los especialistas en acción

Nunca hay que pensar dos veces si contorsionarse para conseguir LA foto perfecta… la luz de la terraza viste los sofás Bleu Nature tal y como lo imaginábamos.  Una pequeña pausa para el té detrás del magnífico mostrador de la cocina… ¡y vuelta al trabajo! Colocamos, comprobamos, disparamos y disfrutamos de la magia del lugar.

Se acabó

Ya es el final del día. Debemos dejar esta antigua fábrica y dejar que vuelva a la vida de cada día de sus inquilinos…